domingo, 29 de noviembre de 2009

Un día cualquiera

El otro día hablaba con Paloma sobre un día cualquiera en Kathmandú...Ella ha decidido extender su periodo sin sueldo un mes más y sus compañeras del trabajo le pedían que les enviara un pequeño "informe" sobre un día cualquiera de su vida aquí, para intentar comprender qué es eso que la retiene aquí... Y esta mañana me he levantado pensando que yo podría hacer lo mismo con vosotros, ¿por qué no?.
Pues tengo un problema...no existe "un día cualquiera" para mí en esta ciudad...cada día es diferente y tengo distintas cosas que hacer. Algunos día voy a Kumari House, a ayudar a Toni a hacer algo, o simplemente a charlar y darme una buena ducha caliente; otros, me dedico en cuerpo y alma a Namasteong, entonces o voy a comprar cosas necesarias con Sanzita, o pintamos la casa, o limpiamos, o acompaño a los voluntarios a donde quieran ir; otros, los dedico a internet y a pasear por esta ciudad que nunca deja de fascinarme; muchas noches las dedico a mis nuevos amigos que tan bien me hacen sentir y nos tomamos unas cervezas en cualquier sitio hablando de todo y de nada, de si debemos intentar arreglar el mundo o dejarlo seguir a su ritmo, de Nepal, de España...
Me doy cuenta de cómo algunas cosas y escenas que los primeros días llamaban mi atención, forman ya parte de mi rutina: el caos, la suciedad, la sonrisa de la gente, los puestos callejeros sobre el asfalto, hombres y mujeres cargando más del doble de su peso con una cinta atada a su frente, el "namaste" continuo...no sé! millones de cosas que si me paro a pensar me ponen la piel de gallina, y me hacen darme cuenta de qué forma Kathmandú se ha metido dentro de mi, y lo mucho que me costará dejarla dentro de tan sólo un mes.
A ver Pati!!que te pierdes... lo que os estaba diciendo! que no tengo ninguna rutina que enseñaros, pero creo que poco a poco os haceis una idea de lo que está significando todo esto para mi, y quizá no os haga falta saber qué hago exactamente en cada momento, sino saber que estoy bien, que soy muy muy feliz y que disfruto de cada momento al máximo no???
Lo único que intento no perderme es el desayuno, en las casi siempre soleadas mañanas de Kathmandú, un croissant y un café latte...eso se ha convertido en algo cuasi sagrado, a partir de ahí...nunca se sabe!!
Desayunando en Kathmandú


Ya tenemos nombre para nuestra "children home"!!!!Se va a llamar Namaste Peace Home, y ya está casi lista!!!no sé si trasladaremos a los niños mañana o el miércoles, pero entonces haré unas fotos para que podáis ver qué maravilla estamos montando!Y para que conozcáis por fin a nuestros "7 magníficos" cada cual más adorable!!
Millones de besos!!

3 comentarios:

  1. Te veo guapísima y feliz, amiga!!! Me alegro tanto... sigo todos los post, todas las fotografías; son muchas cosas en muy poco tiempo, ¿cómo no va a ser cada día diferente? Echo de menos tiempo para recuperar todo el tiempo perdido. Por aquí, todo sigue igual. Acabo de presentar el segundo libro! Una antología de chicas... y estoy contenta, escribiendo sin parar. Un abrazo muy muy fuerte!

    ResponderEliminar
  2. Hola Patri, no sabes el subidon que me ha dado esta mañana cuando he leído uno de tus artículos del blog en la universidad. Me parece genial que escribas contando la maravillosa aventura que sigues viviendo en Nepal. De verdad me llega al corazón cada uno de tus relatos, la sonrisa de los niños y hasta me puedo volver a imaginar que estoy en Katmandhú.
    Un besazo muy grande para ti, y que decirte, que me da una envidia sana que pa que....
    Da muchos besitos a la gentecilla de Kumari House y a la Paloma.
    Vero Nepal Express 2009

    ResponderEliminar
  3. Ey!!! este es un mensaje pa la Paloma y pa ti... que si vosotras sois felices alli que yo tb lo soy por vosotras pero que ya esta bien de prolongar mas meses que tengo ganas de veros!!!! ya de ya!!
    Asi que no me prolongueis mas meses eh?? tranmiteselo a AI MADRE MIA AI DON NOU
    Os quiero mucho
    Enri

    ResponderEliminar